Creo al revés de todo el mundo. A medida que se crece...no se gana la libertad, si no que se pierde. Cuando uno es niño... es libre, hace las cosas y después se da cuenta de lo que esta bien o esta mal, tiene menos sentido de responsabilidad, tiene mas aventura, menos ataduras y mayor inconsciencia.
El pasar del tiempo, me ha puesto frente de un espejo y me mostró que cada vez le rindo cuentas a cada quien de que hago.¿ Por qué? no lo sé, siento la necesidad de explicarme, justificarme en la mayoría de mis actos... no somo acaso seres libres?, pero esa intensa necesidad me lleva a decirle a cada quien que hago, porque, y que me de su opinión. Soy presa muchas veces de la opinión de los demás... me dejo llevar por consejos, y muchas veces le hago caso a tramas mentales más que a mi corazón.
Soy muchas veces muy insegura, y me planteo 30.000 hipótesis antes de hacer algo, o sino voy al otro extremo lo hago sin pensar...
Parece que crezco y vuelvo a decrecer... parece que avanzo y a la vez retrocedo, parece que hago feliz a unos cuantos... y me olvido que es lo que realmente quiero.
Simplemente un desahogo...de una semana bastante pesadita...
Simplemente un colage de emociones...que necesitaba expresar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Lo importante es que haciendo feliz a los otros no se olvide de lo que cree que quiere. A veces ni sabemos que es lo que de verdad queremos y de ahí tal vez la confusión. Igual, encantome su collage ;) desahogo.
Tal vez la solución esta, en no mirarse tanto al espejo ;)... capaz que asi empiezan a cambiar las cosas... es broma, a la unica persona a la que tenes que rendirle cuentas, es a la que ves cuando te miras ahi... a ver si, por una vez, podes ver a la niña libre que tanto añoras... te extraño nena... estoy a mil de laburo, por eso apenas me conecto... see youu
Publicar un comentario