lunes, 9 de julio de 2007

Metamorfosis

¿Cuándo dejamos de ser nosotros y nos transformamos en otra persona? Mirándome al espejo, comencé a analizarme desde lo más profundo. Y descubrí que estoy en una constante metamorfosis, que busca tener un prototipo definido de personalidad, pero factores externos, simplemente no dejan que ese fin se cumpla.
Sin echarle la culpa a nadie, y sin mirar atrás las personas que contribuyeron en mi, se que cualquier persona capaz de analizarme no vacilaría en decirme que mis cambios de ánimo son totalmente constantes.
Así fue que decidí ir con Savrú una especie de guía espiritual por así llamarlo. Oí comentar de el, a dos chicas en el ómnibus, y sin lugar a duda la curiosidad copo mi ser en ese minuto.
Al llegar al lugar, me ocurrió lo que pocas veces ocurre “en este lugar, no sé porque me parece que estuve” sin embargo, sentí además de eso una energía especial, y aunque la frase escrita en la puerta del lugar me pareció bastante de “farmacia” la inconfundible energía que el lugar desprendía, fue la causa justa, para que pusiera mi pie dentro del sitio.
Esperando mi turno, intentaba adivinar que le pasaría a el resto de las personas allí sentadas, la mujer triste con los ojos vidriosos... apostaría que padecía de un mal de amor, el muchacho con cara de preocupación se veía abrumado, seguramente seria un problema que se le estaba yendo de las manos, y justo al observar el rostro de un joven sentado empezaba a analizarlo cuando una voz un tanto enigmática susurro mi nombre, y sin dudar entre a la habitación donde se encontraba Savrú.
No tenia ni idea como empezar, en realidad ni yo sabia porque estaba ahí, porque el explicarle que sentía que cambiaba todo el tiempo, no era muy claro de entender, y siempre tuve la dificultad de decir las cosas importantes frente a personas que imponen cierto respeto.
Tome asiento, lo mire fijo y comencé… “vine porque…” cuando fui interrumpido por la voz misteriosa:-“no necesito explicaciones” susurro…
Ahora si...Evidentemente, no sabia frente a quien estaba parada, me había equivocado, ¿este no era el señor que me iba a aconsejar como seguir mi vida, sin cambiar mi personalidad, y así definir una para el resto de mi camino?
Mi duda fue trasladada a los ojos, lo mire nuevamente pero con un dejo de procuración e incertidumbre.
Me pidió que me levantara, y que regresara al otro día. Que pensara lo que había hecho, y que cuando este segura que vuelva.
Llegue a mi casa, me reí, porque había perdido toda mi tarde, en mirar a una persona que interpretaba el papel de vaya a saber uno que cosa, y que ni siquiera oí una respuesta de su parte, sin duda alguna, tenia que ir al otro día, para decirle, que no servia para nada.
Me levante decidida a decirle lo que pensaba, ¿quien se creía que era? Espere mil horas para hablar, para que solamente me diga “no necesito explicaciones”, esto no iba a quedar así.
Ese mismo día, camine hasta a el lugar, ni siquiera me preocupaban los rostros que allí se encontraban solo quería ir y hablar con él. El tiempo paso, hasta que nuevamente sentí mi nombre, entré... Me postre en la silla lo mire a los ojos y cuando fui a emitir mi primera critica me interrumpió: - “¿notas la diferencia?”
- hoy viniste decidida, me miraste a los ojos, me transmitiste eso, esta es tu respuesta, esto es lo que trasmites cuando quieres seguir adelante en tu camino.
- La seguridad en ti misma, es la que te va a marcar luego la personalidad que llevamos dentro y el camino que tenemos marcado. Exclamo
- Las dudas y la falta de confianza son las que hacen que oscilemos y dudemos de nosotros mismos, tu actitud la primera vez fue la que te llevo a esa serie de cambios, opuestamente ahora la que llevas, esa de seguridad, es la que te va a estabilizar el resto de tu vida.
Me miró a los ojos últimamente. Yo no me atreví a emitir sonido. Bebió un vaso de agua, y me sentí aludido al ver que bajo la cabeza, debía irme.
Volví a caminar, de regreso a casa. Nuevamente era otra persona, esta vez, creo q para siempre.

1 comentario:

Pérez Pensador dijo...

Me gusta mucho como escribis, sin duda algunos tienen más capaciadad que otros para expresar y transmitir sentimentos. Ahora me siento chiquito, me siento David frente a vos que hoy pareces ser Goliat, con la diferencia de que la onda parece que tambien la tenes vos. jaja
Segui escribiendo y no nos prives nunca del placer de leerte.